Por Ramón Fernández Palmeral
1.- LA ROMANA
Ubicación y antecedentes históricos
Algunos historiadores como José Luis
Navarro opinan que por este término pasaba una vía romana, “vis romana”, de aquí su posible
origen, aunque el nombre de La Romana es de origen árabe “Al-Rumân”
que significa "Los granados", según el historiador de toponimia Mikel
Espalza. [Datos que amplio según los recientes comentarios de quien firma como Pako]. El municipio se halla en un valle rodeado por las sierra de
Las Pedrizas, Reclot y Argallat, se eleva 420 metros sobre el mar, dista 40 Km.
de Alicante, con 43,30 Km² de extensión, situada en la sierra de Algayet,
se segregó de Novelda en 1930. En el censo de 1 de enero del 2004, que es el que voy a
consultas (Censo 04) tiene 2.335 habitantes, el genitivo es romaneros,
pertenece al Partido Judicial de Novelda. Se encuentra como ya se ha dicho
el Medio Vinalopó. Tiene las partidas rurales de Alcaná, Algayat,
Beltranes, Batiste, Boquera, Canicios, Cuevas de San Antón, Joveres, La Cruz y
Reclot, Leros, Palaos, Pomares. Linda con los términos de Monóvar al norte,
Novelda al oeste, Aspe y Hondón de las Nieves y Orihuela al sur, Algueña al
este.
También pensé, y esto es
simple especulación de que el origen de La Romana, sea el del antiguo instrumento de peso, de origen romano del siglo II a. de
Cristo. Quien sabe si aquí hubo un centro de pesas y medidas, de una región tan
favorecida por el cultivo de la uva.
Esta localidad fue
visitada por Enrique Cerdán Tato en septiembre de 1959, y escribió una crónica
en valenciano.
SINGLADURA
El viernes 20 de
enero del 2006, le dediqué el día a la localidad de La Romana y a la
pedanía de la Algayat.
Salí por la mañana con mi coche Nissan Almera por la
autovía dirección Madrid, a pocos kilómetros me encontré con un cartel de
señalización que dice Santuario de Orito, me desvié a la derecha y llegué
cerca de la Estación de ferrocarril, no llegué al Santuario, desde allí pase
por Monforte del Cid, Aspe llené el depósito en la gasolinera Prieto, ya al
final del pueblo, antes de tomar una avenida de altos y gruesos y pinos
dirección de La Romana, pinos que casi ya no se ven en los pueblos.
Llegué a La Romana con un tráfico muy denso, sobre todo de camiones que
transportaban grandes bloques de mármol, unos llevan una piedra, otros
dos en las plataformas. A la entrada hay una gasolinera. Cerca de
La Romana los campos de tierras ocres se ven acariciados de parrales, secos,
todavía no les han cortado los sarmientos, son los famosos de la uva embolsada
que tanto nombre ha dado a esta comarca. Es una zona vinícola y aceitunera, los
olivos se ven añosos, centenarios, los almendros torturados, aunque me pareció
ver algunos abandonados y secos, que habían dejado de ser torturados. La
industria, el motor de sus vidas se centra en la transformación del
mármol rojo, gris, blanco, veteados para la construcción.
La iglesia parroquial de San Pedro
Una vez en La Romana, sigo la
lanza visible de la torre de la iglesia, que como guía espiritual nos señala el
centro de todos los pueblos, porque la historia de los pueblos se
encuentra en cuatro puntos: en la iglesia con el registro de Bautismo, en el
Juzgado con el Registro Civil, en el Ayuntamiento y en los cementerios, de
donde nadie escapa.
Aparqué cerca de la iglesia, en
frente en una explanada asfaltada que indica la entrada a una propiedad
privada con arcadas de piedras ocres, señorío, pazo, mansión diría, hay
un pino jorobado, doblado que anuncia la estética de un paraje centenario, cuyo
tronco lo sostiene un muro de ladrillos.
La iglesia de La Romana se dedicada a la advocación
de San Pedro, se sitúa en la calle de Novelda como reza una placa que la misma
fachada de la iglesia, es una construcción de mampostería, pintada de color ocre
albero con una torre cuadrada con tres secciones con reloj, y dos vanos, uno
circular en extremos en forma de cruz y otro inferior rectangular invertido.
Iglesia de San Pedro en La Romana
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El día presentaba su cielo de un denso de
gris, bandadas de nubes pasaban enseñando su anhelada agua sin derramar
una sola gota del deseado zumo divino, hacía frío para mí, porque esto del frío
es relativo, cada cual soporta el frío que puede a su manera, pero
aguanté hasta terminar mi plumilla que aquí se muestra. Luego busqué un bar
para tomar algo o almorzar, reconformarme, pasé junto a la calle de Campoamor.
El poeta don Ramón de Campoamor (1817-1901, fue Gobernador Civil de la
Provincia de Alicante y de quien dijo el ensayista oriolano Ramón Sijé en su
libro antirromántico La decadencia de la flauta y el reinado de los
fantasmas (1935-1973), que era la "viaja mariposa" que voló sobre
el romanticismo histórico y que además era un viejo verde (pg. 15).
Pues bien, este poeta asturiano, nacido en Navia, tiene una corta
calle en La Romana (Alicante) que desemboca en la plaza del Ayuntamiento, plaza
que se llama de Gómez Navarro. El viejo mapa que me dieron en el
Ayuntamiento, aún se conservan impresos nombres de calles dedicadas a
golpistas como la de El Caudillo, General Sanjurjo, Queipo de Llano…, en
fin cada pueblo tiene su historia. Pero me dice Pako, en sus muy
apreciados comentarios que las calles ya no tienen esos nombres, gracias a
Dios, desde hace tres años. Mea culpa y meada culpa que el Ayuntamiento aún dé
estos antiguos callejeros y los siga
dando a los viajeros despistados como yo.
Caminando hacia el Ayuntamiento, y a la espalda de éste encontré un antiguo
edificio en suyo frontispicio se lee la fecha de 1920, y debajo en la pared una
estela de mármol con la efigie de un ilustre y antiguo benefactor de La
Romana, en la que se lee: «La Romana con gratitud y cariño a su benefactor
Gómez Navarro». La estela de mármol blanco tiene en los extremos dos
ramas con piña, la piña es la unidad, el busto de un señor con traje y corbata
se sitúa sobre un haz de laureles. Tenía que averiguar algo más de este señor
que merecía una estela y de cuyo nombre nada sabía, ni siquiera me sonaba, le
pregunté a un lugareño, un hombre cercano a los ochenta años, porque no sé qué
tiene La Romana que la población es muy longeva, sea por el vino, sea por el
aceite virgen extra de oliva, y, como no por el agua y la paz triunfante del
pueblo de la mansedumbre del pueblo.
Gómez Navarro,
ilustre romanero:
Mi lugareño, asaltado por mí en plena calle, a lo
mejor, era don Antonio, o don Justo o don Vicente, tampoco le iba a preguntar
cómo se llamaba, al estilo Azorín por La ruta de don Quijote es una
indiscreción, pero tengo la convicción que, por lo que me contó debía ser
un conservador.
-Buenos días, si no es mucho preguntar ¿me podría
informar quién era este señor de la lápida, Gómez Navarro, el que está ahí en
la estela de mármol?
-Pues sí señor, verá usted,
este señor se llamaba don Luis –habla como mucho respeto hacia esta
persona-, era propietario de casi todas la tierra de La Romana, aunque él vía
en Madrid, ¿sabe? Era ingeniero, pero el jefe de los ingenieros de
Madrid, y socio de Botique [quizás sea Boutique] un fabricante de ascensores en
Villaverde. Don Luis, trajo el teléfono a La Romana, antes de la guerra,
hizo el matero que está ahí abajo, construyó la escuela, el cuartel de la
Guardia Civil que ya no está, y muchas cosas más. Este viejo edificio [se
refiera donde aparece la fecha de 1920] era una almazara y una bodega y una
buena vivienda encima. La finca que está ahí frente [se refiere a donde yo
aparqué el coche] de los pinos era el palacete de don Luis, cuando venía
en verano los niños en edad escolar teníamos que ir a su casa.
Eso es como un palacio, aquí se celebraban grandes fiestas. Fíjese si
tenía dinero que tenía tres hijas discapacitadas y cada una de ellas tenía una
criada, y también tenía un hijo. Cuando las niñas se murieron las enterraron en
el antiguo cementerio. Cuando murió Gómez Navarro también lo enterraron aquí.
-¿Ya debe hacer tiempo
de esto?
-La estela de Gómez Navarro la quitaron los socialistas
cuando ganaron las elecciones [se debe referir a las elecciones de 1982, pero
no lo sé]. Y luego cuando entraron los otros la volvieron a colocar, cosas de
la política ¿sabe? Ve usted esa obra nueva alrededor.
- También he visto –pregunto con cierta sonrisa-
que la iglesia tiene una leyenda encima de la puerta que dice que se construyó
gracias a doña Antonia Navarro. ¿Tiene algo que ver con Gómez Navarro? ¿Eran
hermanos?
-No eran hermanos pero sí eran familia. La
iglesia en la guerra civil fue mercado de abastos, y aquella cruz que está en
la sierra de Las Pedrizas, la quitaron y la bajaron, y cuando entró el bando
nacional, obligaron a los mismos que la quitaron, a subirla otra vez y a
ponerla en su sitio.
Don Luis Gómez Navarro nació en
Novelda, falleció en 9 de mayo de 1954, y en la Casa de Cultura de La Romana le
dedicaron un homenaje con motivo del 50º aniversario de su muerte, el 25 de
septiembre del 2004, con asistencia de tres generaciones de «Gómez Navarros».
Era ingeniero de caminos canales y puertos. Le habían concedieron la Gran
Cruz de Alfonso X. Es autor del libro “Saltos de Agua y Presas de España”. Donó
el matadero de La Romana que era de su propiedad el 20-03-1931, se mostraron infinidad de cartas, fotografías y otros
elementos que descubren su ejemplo como persona, como romanero y como
ingeniero. Todo ello cedido por la familia Gómez Navarro al Ayuntamiento de La
Romana, así con aportación de otras personas.
Es verdad que, arriba en la cumbre del cerro,
se ve una diminuta cruz, que debe ser de gran tamaño, le hice una foto que se
puede ver.
Otros lugares curiosos:
Me despedí de mi
lugareño, improvisado cicerone, un hombre amable, discreto, con la dentadura
inferir ocre y plana sin corte de bisel. Me acerqué caminando hasta la calle
Purísimo, y en el número 10, vi lo que me pareció una librería de viejo que se
llama Malvina, ¡aleluya!, son mi debilidad, así sin más, entré dentro,
sonó un din dong, típico de puertas de comercio, y le pegunté a la dependiente:
–¿Puede decirme
cómo hay aquí en este pueblo una librería tan hermosa? ¿Qué
valiente se atreve en este lugar a poner una librería?
–Sorry, I don not spike Spanish. (O algo parecido).
¡Mi madre!, pensé, me
quedé de piedra, la señora de rostro pálido, bajita, simpática y con
gafas era inglesa y no entendía ni una papa de lo que yo le decía en español.
Así que no hice esfuerzo por poner en práctica mi poco inglés, y además sin
prepararlo, me quedé cortado, y más o menos, por lo que debía decir es que
estaba sustituyendo a la dueña, por esa mañana, y lo único que conseguí
es que me diera la tarjeta de la tienda, que dice:
«Malvina. Librería. Brooks
La Romana. New & Second Leland
Books. Lland.am de Greeting cards. Cuya propietaria es Jisty Lockett».
La librería tiene
revistas en varias lenguas, libros para cambiar, debido, según me enteré
después, porque residen muchos extranjeros. Siempre es día de aprender, sobre
todo en un pueblo del Medio Vinalopó.
Luego me acerqué al bar El
Molina III, tiene la barra a la izquierda, dos máquinas tragaperras, televisión
encendida para animar a la clientela, había tres clientes, tres hombres uno de
ellos tenía acento argentino. Se puso a jugar en las tragaperras del interior,
los sonidos de campanas empezaron su runrún sicodélico y atrayente. Me atendió
una señora con gafas, iba a pedir un tentempié, almorzar, pero me desanimé al
ver unas tapas de pescado frito, viejos y fritos sobre el mostrador sin tapar
por cristales, así que tomé un cortado que me costó 75 céntimos de €. Entré al
cuarto de aseo para hacer aguas, a través de un patinillo que parecía la jaula
de un tigre, lleno de enseres y trastos viejos y el botiquín sobre una
vieja mesa de formica. No me dio buena impresión y salí pronto, nada más acabar
el café.
Tomé dirección al Ayuntamiento situado en la plaza Gómez
Navarro. El municipio se segregó del de Novelda en 1929. Cerca está la
Casa de Cultura que estaba cerrada, normal que lo esté por la mañana de
un viernes. Entré al Ayuntamiento, un edificio nuevo, di los buenos días a dos
señoras de la limpieza que muy educadas me respondieron. Es zona bilingüe.
Una vez dentro, a la derecha, hay unas oficinas, donde me atendió un
administrativo, seco, moreno, extrañado de que le preguntara por Información y
Turismo o alguna guía de la localidad, me dijo que no tenían, que unos meses
saldría una nueva, le di mi tarjeta para que me pusiese un correo
electrónico cuando saliera a la venta. Conseguí me diera un callejero, algo es algo.
Este Ayuntamiento no tenía página web en enero, desde abril tienen una. La Web
que aparece en la Oficial de la Costa Blanca, municipio número 03114 de
los de la Comunidad Valenciana, tiene 9 concejales. Gracias al magnífico
portal: "El Portal Romanero" , leo que actualmente está
gobernado por don Manuel Hernández Riquelme (PP). Este portal es el alma
virtual de La Romana.
Frente al Ayuntamiento
se abre al cielo nublado una plaza con cruz en el centro donde se lee: “En
memoria a los mártires de la Guerra Civil”, custodiada por cuatro azulejos de
la Pasión del Señor. Me quedé un poco maravillado del vía crucis de azulejos,
conté al menos XV.
–Buenos días –le
pregunté a una señora que llevaba dos bolsas de la compra- ¿Puede decirme si
esto es un vía crucis?
-Sí, es un vía
crucis, porque la plaza antes, a principio de siglo fue un cementerio y lo
trasladaron al nuevo que está fuera del pueblo.
Veo muchos
azulejos rotos de la Pasión del Señor.
–Sí, ya lleva
tiempo, deben ser los gamberros.
Saqué fotos que
se pueden ver en el reportaje fotográfico. Pero con detenimiento, ya en
mi ordenador he visto que el origen de estos destrozos, se deben a otras
razones, sólo están rotas las caras de los judíos o de los romanos que azotan
al Señor, y ninguna cara rota del Cristo que aparece con túnica blanca.
Esto no es origen de gamberros, sino de algún beato que rompió las caras de las
figuras de quienes, él creyó, en su infantil beatitud que crucificaron o
castigaron al Señor. Es curioso si se miran con detenimiento estos y otros
detalles.
Desde aquí y desde
ahora, insto a los romaneros que pidan la restauración de estas joyas de la
alfarería religiosa valenciana, únicas. Manises que no cuesta tanto, a mí
me sorprendió su abandono y deterioro.
Teatro: Cecilia Verdú,
una mujer que creció en un ambiente intelectual es natural de Monóvar y
romanera de adopción, es la directora del Grupo de Teatro "Tarafa",
compuesto por una veinte actores y actrices amateur, que cumple 10 años desde
su creación, durante estos años han representados numerosas comedias de autores
españoles.
Pintura:
El pintor Francisco Ibáñez Prieto es romanero aunque reside en Alicante, su
pintura ha evolucionado desde el figurativo hacia un cubismo personal. Ha
participado en numerosas exposiciones colectivas e individuales.
La ruta del vino
La Romana, se
halla en la ruta del vino alicantino, va teniendo gran aceptación
en este complejo mercado vinícola, tanto en España como en el extranjero. Fue
uno de los principales productos que se exportaban en el puerto de Alicante, tanto
en la Edad Media como en la edad moderna, era el vino el alma corpórea de sus
tierras. También la uva embolsada de mesa es una de las mejores colectada en
diciembre. Desde la plaza Gómez Navarro me acerqué en coche a la famosa
Bodega Cooperativa La Roma
en calle Polsegueros, 7, donde venden vino al público tanto embotellado como a
granel. En el catálogo que facilitan a los turistas y clientes, leemos el
eslogan: "Vinos de calidad con
estilo propio”. Modestamente quiero inventar un nuevo eslogan como "Los romanos ya bebían vino
romanero". Estas bodegas se fundaron en 1964, se reformó en 2002,
tiene una capacidad de 4 millones de litros, cisternas de aluminio. Se elaboran
desde las variedades de uvas tinta de Monastrell, Tempranillo, Merseguera, y
Macabeo. Compré una garrafa de tinto clarete a un precio risorio 1.45 €
IVA incluido, y el vino es bueno, de cosecha. Entra como un poema romántico.
De allí me acerqué a una pedanía, a la de
Algayat, también llamada Umbría de
Algayat, CV 842, tiene una ermita que la visitó el obispo don
Victorio Oliver, el 27 de febrero del 2000. La carretera está recién asfaltada,
no vi a nadie, más que a un gato blanco con el hocico negro, la paz, el
silencio, los montes, en fin un lugar de paz, no lejos de la carretera 1,2
kilómetros, marca una señal. Los gatos son unos felinos muy
observadores, en realidad los vigilantes de los caseríos y pueblos, los que
alertan a los perezosos perros para que estos me ladren. La verdad es que
apenas he encontrado perros, por todas partes gatos lo cuan demuestra que a los
gatos no se comen aquí como puede pasar en otras regiones o comarcas de la
España profunda.
Regresé a Alicante por la tarde,
por la CV-840, circunvalación de Novelda y autovía para Alicante, me hubiera
gustado comer un cordero a la romana, en alguno de los restaurantes de la zona,
sin embargo, en La Romana no vi esta delicia gastronómica hecho al horno en la
cazuela de barro como los cochinillos. Se puede acompañar con un puré de
patadas. En fin a alguien se le ocurrirá la feliz idea gastronómica.
Comer se ha convertido en el júbilo de mi estómago.
(La Casa Ercarná, Exposición de la Asociación de Artistas Alicantinos).
NOTAS
1 ] Don Luis Gómez Navarro nació en Novelda, falleció en 9 de mayo de 1954, y en la Casa de Cultura de La Romana le dedicaron un homenaje con motivo del 50º aniversario de su muerte, el 25 de septiembre del 2004, con asistencia de tres generaciones de «Gómez Navarros». Era ingeniero de caminos canales y puertos. Le habían concedieron la Gran Cruz de Alfonso X. Es autor del libro “Saltos de Agua y Presas de España”. Donó el matadero de La Romana que era de su propiedad el 20-03-1931, Se mostraron como infinidad de cartas, fotografías y otros elementos que descubren su ejemplo como persona, como romanero y como ingeniero. Todo ello cedido por la familia Gómez Navarro al Ayuntamiento de La Romana, así con aportación de otras personas.
Alicante, viernes, 20 de enero 2006
NOTA.-
Digno son de mencionar la Casa Cueva como zona lúdica. También los jardines de la casa de don Luis Navarro. La carrasca (dicen los romaneros que es milenaria), que hay que ver sin falta. Los grupos de pintores de Alicante, siempre son bienvenidos, y nos lo pasamos muy bien con los picnic que organiza el Ayuntamiento en la pinda, y jornadas de pintua al aire libre.
Del libro: Singladuras por el Vinalopó Medio de venta en Amazon
No he leido todo el árticulo detenidamente, pero describir a la carrasca como centenaria, me parece un sacrilegio, segun los expertos se le calcula una edad aproximada al milenio. De ahí su nombre, "Carrasca Milenaria".
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